Miércoles, 17 de julio de 2024
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Los objetivos de descarbonización para frenar el avance del cambio climático y la saturación de los núcleos urbanos hacen que la movilidad sostenible sea una prioridad en la agenda global.
Por Dalia Alonso
¿Cuántas veces te mueves al día? Para ir a clase, al trabajo o a ambos, para tomar algo con tus amigos en ese sitio tan cool que queda a veinte minutos andando, llevar a los niños al cole, ir al cine, o simplemente por el placer de caminar y dar un paseo. La movilidad es uno de los principales ejes de nuestra vida, especialmente si vivimos en ciudades en las que las distancias se amplían. Este imperativo en nuestra vida diaria hace que todos los días sean el día de la movilidad.
La movilidad sostenible implica buscar soluciones para que todos los miembros de la sociedad podamos desplazarnos de un lugar a otro con bajo coste ambiental y energético. En palabras llanas: transporte no contaminante y accesible para todos y todas.
En los últimos años, la conciencia colectiva sobre la importancia de la movilidad sostenible para fomentar la descarbonización ha ido en aumento, debido a los efectos visibles del cambio climático y a situaciones como la congestión del tráfico, que en determinadas ciudades ya es parte del paisaje. Por ello, además de las acciones individuales, las administraciones han empezado a implantar medidas para favorecer el transporte público.
Además de la Semana de la Movilidad, que desde hace más de 20 años se celebra anualmente en la Unión Europea con diferentes actividades en torno al transporte (en 2023, por ejemplo, el tema principal fue la eficiencia energética), destaca en España la recientemente aprobada Ley de Movilidad Sostenible. Esta norma propone soluciones como el fomento de las vías alternativas de transporte (coches compartidos, vehículos de uso temporal…) y el tratamiento de la información sobre movilidad a través de smart data, esto es, la recolección de datos por parte de administraciones con el objetivo de optimizar la accesibilidad a este derecho público.
Por ejemplo, en la ciudad de Madrid, , se ha utilizado City Performance Tool, una herramienta desarrollada por Siemens para recabar información y datos que indiquen el camino a seguir para reducir las emisiones y mejorar la calidad del aire y de la vida en los entornos urbanos. Se trata de un ejemplo del tipo de medidas y leyes enmarcadas en el Green Deal o Pacto Verde Europeo, que tiene como objetivo principal reducir las emisiones a cero en 2050, y en el que la gestión del transporte sostenible es uno de los puntos fuertes.
Otra de las bazas más conocidas de la movilidad sostenible es el vehículo eléctrico, que, contribuye a la reducción de las emisiones. Por otro lado, la idea de la ciudad de los 15 minutos, que resume el ideal de tener todos los servicios necesarios a menos de un cuarto de hora de nuestra casa, también es fundamental a la hora de plantearnos cómo queremos que sea la movilidad en las ciudades.
No es solo plantear un sistema de transporte público accesible a todos, es que el movernos de un sitio a otro sea un trámite y no una parte significativa de nuestro tiempo. La movilidad activa solo es posible en una ciudad en la que los espacios urbanos estén adaptados al peatón, y en la que la convivencia entre personas y las necesidades de transporte personal y de mercancías puedan convivir en armonía.
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